Joan Longo
Dentro de la construcción de viviendas existe una técnica llamada superadobe. Esta técnica no es muy conocida, pero es dueña de varias características que la transforma en una técnica muy especial.
Esto último se debe a que las viviendas realizadas mediante la técnica del superadobe son viviendas ecológicas, económicas, resistentes a huracanes, terremotos e inundaciones. Como se puede apreciar, son características que resaltan en estos tiempos donde la economía no pasa por su mejor momento y donde la naturaleza nos muestra toda su fuerza. Además, con esta técnica cada vivienda puede ser única y exclusiva, dado que permite realizar diseños personalizados.
La técnica se basa en bolsas de tierra y alambre de púas. Ahondando un poco más en este importante punto,según un informe de El adelantado, se trata de sacos de polipropileno que se degradan luego de 300 horas de exposición solar, rellenos de una mezcla de arena, cal y agua, que se unen entre sí con alambre.
Generalmente, estas viviendas llevan el nombre de Domo por la forma de cúpula que la mayoría de ellas presenta. Y gracias a esta forma y a su efecto “cueva”, la vivienda realizada con esta técnica puede ser muy cálida en invierno y muy fresca en verano, permitiendo ahorrar luz y gas.
Actualmente, con esta técnica se están construyendo viviendas en Haití y en otras zonas afectadas económica y naturalmente. Sin embargo, la técnica también arribó a España y a varios países más, ya que este tipo de viviendas no son diseñadas solamente para los lugares que mencionamos primero, sino que también son casas para construir en todas partes del mundo, contribuyendo al medio ambiente y también al bolsillo de las personas.
Los promotores de esta técnica señalan que el domo (así llaman a esta técnica) es mucho más que una forma de construir viviendas. Se trata de una forma de vida. Y es más, ellos promueven la autoconstrucción de las viviendas con superadobe, por lo que brindan cursos de formación para enseñar la técnica y que cada uno, bajo la supervisación de un técnico cualificado, pueda construir su propia vivienda.
“Nos gusta promover la autoconstrucción, que la gente aprenda a hacerse sus casas y vea que es posible hacer una casa ecológica a un precio razonable”.
Por último, para considerar un poco más a esta técnica debemos tener en cuenta que construir una vivienda de esta manera podría tener un coste aproximado entre 6.000 y 10.000 euros, según el acabado que se le dé a la vivienda.
Fuente: Vivir Hogar